MEMORIA EMOCIONAL

Quiero compartirles la experiencia que he tenido en mi vida personal y profesional.

Al inicio llegue para obtener conocimientos que no tenía muy claros para ponerlos en la práctica como psicoterapeuta, lo que iba compartiendo Edgar en cada uno de los módulos del Diplomado de formación no solo lo fui practicando en beneficio de mi paciente; sino que yo también llegue con el tiempo a ser una paciente. Cada módulo tuvo un profundo y significativo aprendizaje. Quiero reiterar que Edgar siempre ha compartido sus conocimientos y experiencia terapéutica con desprendimiento. Es una parte humana característica de él, el dar y compartir. Quiere que cada uno de quienes formamos los grupos de alumnos, tengamos los beneficios que da el servir a otros, también tiene la finalidad de ser cada vez más el número de personas conscientes de hacer los cambios necesarios para vivir. Sanando todo lo que sea posible sanar.

Mi vida personal ha cambiado de forma gradual, con beneficios en lo familiar, en mi salud, en mi economía y en lo profesional. Le doy las gracias al Dios en el que creo, a mí misma por haber llegado al espacio de Memoria Emocional y a Edgar Mendizábal por creer en mí, porque hoy estoy viviendo momentos en la que me siento más consciente de mi vida, de mi familia, de mi profesión como psicóloga. Incluso más abierta a sorprenderme cada día que vivo, descubriendo la vida de muchas formas y colores que antes no lo había visto»